lunes, 20 de diciembre de 2010
Inspiración profunda, espiración ruidosa
Hay tardes de esas en las que no pasan las horas, las agujas del reloj pesan como si fueran de plomo y su histérico tic - tac parece deshacer el camino andado. Hay tardes a las que les crecen telas de araña, se llenan de polvo como los trastos viejos y su color amarillo recuerda al de periódicos olvidados. Hay tardes a las que se les oxida el aire, que peinan canas y a las que no hay maquillaje que les disimule las ojeras. En definitiva, hay tardes de esas que apestan a alcanfor y naftalina.
Publicado por
Gorxeo
a las
17:14
3 comentarios:
Hay tardes como esta, que envuelta en el calor de una manta, me ato a ese tiempo que no quiere correr y pienso en todo lo que ha sido y podrá ser.
si os sobra tiempo, dádmelo!! :D
Muy chulo el micrrelato y muy interesante el blog.
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